Respeto máximo a la identidad y a las variedades autóctonas en viñedos de altura en el Valle del Cidacos

Una de las claves de Queirón es el trabajo varietal, el esfuerzo por la recuperación de espacios para la vid y de técnicas en las que unimos la tradición y la innovación en nuestros viñedos. Nos encontramos con una amalgama riquísima de posibilidades. Garnachas centenarias, garnachas de veinte, treinta, cuarenta años en viñedos a 600 metros. Gracianos nuevos en altura, tempranillos idílicos encaramados en las cumbres de la Sierra de Yerga y variedades como el tempranillo blanco o la maturana blanca que se irán incorporando a los vinos de Queirón. Soñamos porque somos felices en la viña.

Condiciones extremas de altitud, suelos pobres y microclimas diversos
Bodegas Queirón, ubicada en el corazón de la Rioja Oriental, cultiva una selección de variedades de uva que reflejan la singularidad de su terroir y su compromiso con la calidad. Las condiciones extremas de altitud, suelos pobres y clima diverso permiten a la bodega explorar tanto variedades tradicionales como autóctonas, siempre con un enfoque respetuoso con el medio ambiente y la biodiversidad.

Variedades tintas

• Tempranillo: Variedad emblemática de Rioja, cultivada en diversas parcelas de Queirón. Todas en alturas superiores a los 600 metros. Se caracteriza por su capacidad de adaptación a diferentes microclimas y su versatilidad en la elaboración de vinos con buena estructura y potencial de envejecimiento.

• Graciano: Variedad autóctona que aporta acidez, frescura y complejidad aromática a los vinos. En Queirón, se cultiva en viñedos de altura, como en la Sierra de Yerga, donde las condiciones extremas favorecen la expresión más pura de esta cepa.

• Garnacha: Variedad con una larga tradición en la región, cultivada en viñedos históricos como El Arca. Aporta vinos con elegancia, profundidad y longevidad, reflejando la memoria viva de la viticultura de Rioja Oriental.

Variedades blancas

• Viura: Variedad blanca tradicional de Rioja, utilizada en la elaboración de vinos blancos con buena acidez y potencial de crianza. En Queirón, se cultiva en combinación con otras variedades para crear vinos equilibrados y expresivos.

• Tempranillo blanco: Variedad blanca derivada del tempranillo, cultivada en Queirón para elaborar vinos blancos con frescura, mineralidad y elegancia.

• Maturana blanca: Variedad autóctona recuperada por Queirón, con una historia documentada desde el siglo XVII. Produce vinos de gran calidad, aunque con una producción limitada.